Ensenada, B.C.- La reciente decisión del gobierno estatal de derogar los estímulos fiscales para empresas exportadoras en Baja California ha generado una profunda inquietud en el sector agrícola. Walberto Solorio Meza, presidente del Consejo Agrícola de Baja California (CABC), enfatizó el impacto inflacionario que esta medida tendrá, aumentando los costos de producción de alimentos frescos.

La derogación de los artículos 180 y 181 de los estímulos fiscales estatales representa un duro golpe para la competitividad del sector agrícola en la región. Solorio Meza destacó que esta acción pone en riesgo la generación de empleos y provoca incrementos en los costos de frutas y verduras, afectando a sectores ya marginados de la sociedad.

Hasta el año 2023, los beneficios fiscales jugaron un papel crucial en el fomento de la productividad y generación de empleo en la agricultura. Con la eliminación de estos estímulos, los costos operativos para la producción agrícola podrían aumentar entre un 30 y un 36%.

La posición estratégica de Baja California como proveedor clave y complementario en el abastecimiento de alimentos frescos a Estados Unidos está ahora en riesgo. Solorio Meza expresó su preocupación por la carga tributaria que podría resultar en una disminución de la superficie de producción agrícola y, como consecuencia, aumentar el desempleo en áreas con limitadas alternativas de trabajo.

El líder del sector agrícola resaltó que la tecnificación y desarrollo son fundamentales para la agricultura en Baja California. Sin estímulos estatales y con un incremento en la carga tributaria, se limita la capacidad de producción, impactando negativamente en la generación de empleos y afectando a las familias más vulnerables.

Solorio Meza hizo un llamado urgente a las autoridades estatales para reconsiderar la eliminación del estímulo fiscal y buscar alternativas que impulsen el crecimiento de la industria agroexportadora. Subrayó la necesidad de implementar estrategias que respalden el desarrollo de uno de los sectores más importantes para la economía y el bienestar social de Baja California.